En un país con una tradición gastronómica tan antigua, exquisita y arraigada como España, siempre ha sido difícil la introducción de nuevos sabores venidos desde el extranjero. Aún así hay un estilo que destaca, ¿por qué triunfa la cocina asiática en España?
EVOLUCIÓN DE ESTILOS DE COMIDAS: LA COCINA ASIÁTICA EN ESPAÑA
Ya en los 60 la comida italiana se hizo un hueco en los platos de las familias, mientras que el fast-food americano tuvo su auge a mediados de los 70, ayudado por la cantidad de películas de Hollywood que triunfaron en las salas de cine.
Sin embargo, por lo que a la cocina asiática en España se refiere, no fue hasta los años 90 cuando empezaron a proliferar locales de este estilo.
Hoy en día, comer en restaurantes chinos o japoneses es menos complicado que antaño, y poco a poco, con propuestas como la de Little Thai, el abanico también se abre a la gastronomía tailandesa en Valencia y en el resto de España.
EL ÉXITO DE LA COMIDA ASIÁTICA
El motivo de su éxito puede radicar en diferentes y múltiples factores, aunque sin duda sus deliciosas y variadas propuestas con sabores diferentes como el toque agridulce, la cocina wok o esas salsas que hasta hace unos años eran desconocidas para el español medio, han ayudado a que se vea la cocina asiática como algo más que una propuesta económica y sabrosa, sino que también se ve como algo elaborado y trabajado en el que se notan los siglos de tradición oriental.
La cocina asiática no es especialmente complicada si se tiene maña y años de trabajo detrás.
Por eso, en Little Thai muchos de nuestros trabajadores son nativos con años de experiencia que son capaces de elaborar las más de 800 combinaciones posibles en unos pocos minutos.
LA COCINA ASIÁTICA EN ESPAÑA: AÑOS 90 Y 2000
Y es que si los 90 fueron el momento China y el año 2000 fue el de Japón, desde Little Thai creemos que esta década es sin duda el momento de Tailandia, que ha llegado para quedarse en Valencia y en el resto de occidente.
Nosotros, de momento, somos tu Restaurante Tailandés en Valencia de confianza.